Un estudio reciente, publicado en la revista científica Frontiers in Veterinary Science, aporta avances importantes en el desarrollo de vacunas y pruebas de diagnóstico para el control de la tuberculosis animal, utilizando la cabra como modelo. La investigación, liderada por el Centro de Investigación en Sanidad Animal (IRTA-CReSA) y con la participación de NEIKER-Instituto Vasco de Investigación y Desarrollo Agrario (ambos socios de INNOTUB), junto con la Animal & Plant Health Agency del Reino Unido y la empresa Lionex Diagnostics and Therapeutics GmbH, de Alemania, ha evaluado diversas estrategias de vacunación, incluyendo el uso de la vacuna Bacille Calmette-Guérin (BCG) y vacunas inactivadas de Mycobacterium bovis (HIMB), con el objetivo de desarrollar herramientas diagnósticas más precisas que permitan diferenciar entre animales vacunados e infectados. Los resultados de este estudio destacan el potencial de la vacunación intranasal con BCG, un enfoque innovador que ha demostrado ser capaz de inducir una respuesta inmune robusta sin generar interferencias significativas en las pruebas de diagnóstico basadas en antígenos definidos como ESAT-6, CFP10 y EspC. Estos antígenos son fundamentales para implementar pruebas DIVA (Differentiating Infected from Vaccinated Animals). La vacunación intranasal no solo aprovecha el hecho de que la infección por tuberculosis se produce principalmente a través de las vías respiratorias, sino que también reduce los efectos adversos asociados a otras vías de administración, como la subcutánea. Por otro lado, el estudio también ha investigado regímenes de vacunación combinados que incluyen una primera dosis subcutánea seguida de un refuerzo intranasal. Esta estrategia ha mostrado buenos resultados en la inducción de respuestas inmunitarias y algunos de los candidatos evaluados también han demostrado buena compatibilidad con las pruebas de diagnóstico DIVA. Así, el uso de antígenos definidos en las pruebas diagnósticas de intradermorreacción y del interferón-gamma ha eliminado casi por completo las interferencias causadas por las vacunas, mejorando significativamente la fiabilidad de estas herramientas diagnósticas. Esto representa un avance crucial para los programas de control de la tuberculosis animal, especialmente en zonas con alta densidad ganadera o donde la enfermedad sigue siendo un desafío sanitario y económico relevante. Estos resultados son particularmente relevantes para la ganadería caprina en España, que cuenta con una de las mayores poblaciones de cabras de Europa. Los hallazgos de esta investigación podrían transformar los programas de control de la enfermedad, promoviendo una producción ganadera más sostenible y reduciendo los riesgos para la salud pública. Este estudio ha sido financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación de España y la Agencia Estatal de Investigación (Ref. PID2022-142939OR-C22) y por la Comisión Europea a través del programa Interreg POCTEFA 2021–2027, en el marco del proyecto INNOTUB II (EFA115/01) cofinanciado con fondos FEDER. El artículo completo está disponible en: DOI: 10.3389/fvets.2024.1524461.